Devocionales

La esperanza que se demora, no es negada

Joni Eareckson Tada 30 de octubre de 2023
La esperanza que se demora aflige al corazón; el deseo cumplido es un árbol de vida. Proverbios 13:12 (NVI)

¿Cuántas veces te ha ilusionado una esperanza sólo para verla frustrada? Un minuto estás volando alto; al siguiente, todo está emboscado.

Así me sentía después del accidente que me dejó paralizada cuando yo era una adolescente. Al principio tenía esperanzas de que me recuperaría, así que oraba por una sanación milagrosa. Pero después de cientos de oraciones, de ser ungida con aceite, de confesar pecados, y de ir a muchos servicios de sanación en la iglesia, me quedó claro que nunca me alejaría de mi silla de ruedas. Mis esperanzas fueron destrozadas; estaba desconsolada.

Pero Proverbios 13:12 no dice que la esperanza negada aflige el corazón, dice que “la esperanza que se demora aflige al corazón; el deseo cumplido es un árbol de vida” (énfasis añadido).

Dios no está negando mi esperanza de caminar otra vez. Él sólo la ha pospuesto.

Algún día mis esperanzas se verán cumplidas en el cielo. Por el momento, Dios tiene un plan mucho más glorioso que el darme piernas que caminan. Como una discípula de Dios comprada con sangre, tengo confianza en que Su voluntad para mí en mi cuadriplejía es lo “bueno y aceptable y perfecto” (Romanos 12:2c, NBLA).

Sin embargo, si no puedes ver tus aflicciones difíciles como parte de la voluntad buena y perfecta de Dios para ti, lo entiendo. Sé lo que es sentir que Dios está muy lejano.

En aquellos primeros días después de mi accidente, todo lo que leía en la Biblia sonaba como un cliché. Pero entonces encontré Isaías 50:10b: “Si caminan en tinieblas, sin un solo rayo de luz, confíen en el SEÑOR y dependan de su Dios” (NTV). Me describía perfectamente: en la oscuridad sin un solo rayo de luz. Ese versículo no me dió alegría, pero sí me dió esperanza.

La esperanza bailando en mi corazón se sentía tan bien que tuve que hacer algo al respecto. Seguí este trayecto de esperanza hacia Romanos 15:13: “Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza…” (NVI).

Pensé: OK, déjame ver si entiendo bien, si confío en Él, ¿Dios me llenará con toda (no alguna, sino toda) alegría y paz? ¿Y después la esperanza se rebosará?

Parecía demasiado bueno para ser verdad. Pero, otra vez, tenía que reaccionar ante esto. Así que empecé a basar mi vida en la Palabra de Dios lo mejor que podía. Regresé a Isaías 50:10 mil veces. Mi confianza en el nombre de Dios creció. Mi esperanza en los propósitos de Dios creció. Y mi fe en la bondad de Dios creció.

Y esa es la conclusión. De eso se trata todo esto. “Fe” es sólo una palabra, una palabra elegante y religiosa, hasta que es puesta en práctica y deja marca. Hasta que emerge de la obra de vida con un poco de determinación sagrada en ella. Lejos de ser etérea, la fe es “la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven” (Hebreos 11:1, JBS).

La fe en Cristo tiene sustancia; en otras palabras, mi fe es una prueba sólida del poder y del llamamiento de Jesucristo. Mi fe es también evidencia de las cosas que no puedo ver, pero de las que depende mi propia vida.

Dios sabe que mi silla de ruedas es, por ahora, la situación óptima para mi felicidad suprema en Jesucristo. Y estoy de acuerdo. Mi sanación completa puede que se demore un tiempo, pero estoy feliz de esperar el tiempo impecable de Dios. No sólo estoy feliz de esperar, también estoy agradecida de que puedo conocer mejor a Jesús mediante mis dificultades. Él hace que valga la pena la espera.

Así que si la vida parece insoportablemente difícil en este momento, recuerda que algunos de los mejores regalos de Dios tienen que ser abiertos en la oscuridad. Confía en Dios cuando todo parezca imposible y Él hará que tu corazón sea valiente y firme. Confía en que Él está haciendo algo bueno, el tipo de bien que durará por toda la eternidad.

Señor, a veces lucho para tener esperanza en que Tú algún día cumplirás todos mis anhelos más profundos. Quiero desearte a Ti por encima de todas las cosas. Ayúdame a fijar mi corazón en lo que Tú quieres para mí. En el Nombre de Jesús, Amén.

Las secciones siguientes pueden contener enlaces de contenido solo en inglés.

RECOMENDAMOS

Presenciar a Dios cada día convierte lo mundano en santo. Lo doloroso se vuelve pacífico. Lo incierto se vuelve la esperanza más bella de todas. Para aprender más de Joni Eareckson Tada y de su nuevo libro The Practice of the Presence of Jesus, ¡visita el sitio web aquí!

CONÉCTATE

 

¿Buscas más aliento? Proverbs 31 Ministries tiene recursos bíblicos gratuitos en español que traerán esperanza y te ayudarán a navegar el día a día.

PROFUNDICEMOS

Hebreos 11:1, Es pues la fe, la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven. (JBS)

¿Qué compite en tu corazón hoy con tu afecto por Jesús? ¿Cómo sería para ti tener esperanza en las promesas de Dios hoy? ¡Comparte con nosotras en los comentarios!

© 2023 por Joni Eareckson Tada. Todos los derechos reservados.

Proverbs 31 Ministries agradece a WaterBrook & Multonomah por patrocinar el devocional de hoy.

Haz click aquí para ver nuestra política sobre los enlaces de terceros.


NUESTRAS CREENCIAS

Si la vida se siente increíblemente difícil, haz clic aquí para acceder a nuestros recursos de consejería y asesoramiento.

Estamos agradecidas a nuestras voluntarias por su trabajo realizado en la traducción de este devocional al español. Conócelas aquí.

Únete a la conversación

¡Nuestra campaña financiera de fin de año está activa ahora!